Las claves de un piso en Bilbao de estilo ecléctico: muebles con carácter, zona de día diáfana y suite matrimonial

"El mayor desafío es siempre captar la esencia del cliente. Diseñar su hogar es como confeccionar un traje a medida, transmitiendo la sensibilidad por cada detalle y haciéndolo partícipe de cada elección de manera consciente". Opina el Estudio R&V Arquitectura, autor de la rehabilitación completa de este piso del centro de Bilbao.

También reconocen que en cada reforma surgen retos nuevos y siempre hay que saber adaptarse a cada situación. En este caso, las necesidades eran claras: una zona diáfana de día que comprendiera salón, comedor y cocina y esta con despensa, "muchas veces la gran olvidada, cuando es más que un plus", comenta el interiorista. Y, de hecho, esta despensa oculta incorpora la zona laundry, un gran congelador y un espacio de almacenamiento.

Pros y contras de la vivienda en origen

Las características de origen de la vivienda se presentaban favorablemente en cuanto a su ubicación, en un séptimo piso, por lo que cuenta con una gran entrada de luz natural. En cuanto a los 82 metros cuadros, "eran más que suficientes para cubrir las necesidades de la familia" (pareja con un niño), explica el estudio. Porque las posibilidades de la distribución eran muy amplias por la disposición de las ventanas que proporcionan dicha luminosidad directa.

Lo que no resultó tan favorable, inicialmente, era la distribución original, ya que al tratarse de una finca de 1972, la vivienda contaba con dos accesos (el principal y el de servicio). Además, el hall de entrada era minúsculo y oscuro, el salón-comedor pequeño y la cocina aislada. También tenía tres dormitorios y dos baños, uno de los cuales interrumpía la fluidez de la zona de día, separando los espacios de manera poco funcional.

salon mueble televisor y piezas icónicas

Nueva distribución focalizada en la zona de día diáfana

En los cuatro meses que duró la reforma, aproximadamente, el proceso se centró en derribar toda la tabiquería para replantear la distribución, renovar por completo las instalaciones (fontanería, electricidad e iluminación) e incorporar un sistema de aire acondicionado por conductos. Se eliminó, por supuesto, uno de los accesos a la vivienda y, con la nueva distribución, se buscó generar espacios más abiertos y luminosos.

Tras estudiar las posibilidades que ofrecía la planta, el diseño del nuevo esquema de la vivienda puso el eje central en la zona de día, sin obstáculos y diáfana, tal como la solicitó el cliente. Y es que, según R&V Arquitectura, "en los últimos años, la manera de habitar los espacios ha cambiado significativamente, y la cocina ha pasado a ser un punto de encuentro social en la vivienda y comunicar los espacios transforma la experiencia cotidiana". Por su parte, el comedor lo consideran el epicentro de la casa, en calidad de nexo entre la cocina y el salón, "donde se come, se trabaja y se disfruta en familia".

dormitorio en suite con papel oscuro pared

El dormitorio principal se ha convertido en suite

La reforma ha mantenido las tres habitaciones originales y los dos baños, convirtiendo dos de ellas en los dormitorios principal e infantil, respectivamente, y la tercera destinándola a un despacho polivalente, adaptable a futuras necesidades. En el dormitorio principal se incorporó un baño privado para mejorar la comodidad y funcionalidad, y cuenta con un amplio vestidor, fomentando una sensación de refugio de paz.

La decoración y la selección del mobiliario fueron otro punto clave del proyecto. La primera se planteó para generar un lienzo en blanco que dialogara con el pavimento natural y se revistieron las paredes con un papel texturizado que recuerda a los lienzos, potenciando el reflejo de la luz. En cuanto a los muebles, estos destacan por su historia y carácter, como las sillas, todas ellas diferentes, rompiendo con la formalidad, así como piezas icónicas del diseño de varias épocas.

Una cuidadosa selección de mobiliario singular

Cabe destacar que se priorizaron piezas con historia y valor artesanal, reduciendo al mínimo la necesidad de adquirir mobiliario nuevo, con un enfoque sostenible. "¿Por qué recurrir a comprar muebles nuevos cuando se puede encontrar elementos del pasado que aporten un valor añadido y una identidad propia al espacio?", se pregunta el estudio. Asimismo, y siguiendo su estilo profesional, no faltan los elementos de color para aportar vitalidad.

Como conclusión, se considera que "el mobiliario y los elementos decorativos pueden sustituirse con relativa facilidad, pero una mala distribución es difícil de corregir". De ahí que afirman, a modo de consejo clave, que prever cada detalle al centímetro es lo que permite controlar cada paso de la obra.

"No se trata de una vivienda grande donde los espacios se sienten despersonalizados, sino de un hogar bien pensado, donde cada mueble, forma y color tiene una razón de ser" _ R&V Arquitectura