Parece imposible que un dormitorio infantil pueda estar siempre ordenado. Pero con los accesorios adecuados y aplicando algunos trucos, la habitación de los niños puede estar tan organizada como cualquier otro lugar de la casa. Para lograrlo, es importante que a los más pequeños no les resulte pesado recoger. ¿Pero cómo conseguirlo? poniéndoselo fácil. Es más sencillo mantenerlo todo ordenado si los muebles se adaptan a su estatura y los juguetes quedan a su alcance. Del mismo modo que también les resultará más cómodo ordenar si cada cosa tiene su sitio y si hacerlo se convierte en un juego.
Otro punto clave es que no haya un exceso de juguetes en su habitación. Y cuando los haya, elegir con ellos los que son para donar o tirar, y clasificar el resto: los libros con los libros, los lápices con los lápices, los peluches con los peluches, etc. Además, crear zonas temáticas en cada rincón de la habitación también ayuda. Es decir, que haya un espacio donde hacer los deberes, otro donde jugar, otro donde leer...
Aunque no hay que olvidarse de que los niños son niños, y tampoco se les pueden pedir cosas que no pueden hacer. El Método Montessori puede ayudarnos a saber qué les podemos pedir según su edad. Entre los dos y tres años, podrán ser responsables de guardar los juguetes con supervisión; entre los cuatro y cinco, vestirse solos; entre los seis y siete, hacer la cama y ordenar el escritorio; y a partir de los ocho, limpiar la habitación.
12 accesorios y trucos para conseguir un dormitorio infantil ordenado