1. MI CAMINO
Estudié Administración de Empresas, y también comencé la carrera de Filosofía, que espero completar algún día; luego trabajé en investigación de mercado para márketing en una empresa multinacional y descubrí que disfrutaba mucho investigando. Mi entrada al diseño fue experimental: decidí crear objetos de manera libre, siguiendo mi propio instinto, sólo con recursos disponibles en la ciudad de Valencia.
2. FILOSOFÍA CREATIVA
La búsqueda de esa libertad es muy importante para mí, y la fantasía –la ensoñación–, central en mi trabajo. Mi creatividad es completamente conceptual, basada en ideas. Y la parte de acción, la producción, tan espontánea como experimental. Comencé buscando artesanos que me ayudasen, y tuve la suerte de encontrar a José Sebastiá y Sara Sorribes. Les llevo mis ideas, y todo se hace realidad gracias a mi autodisciplina y dedicación y su sabiduría.
3. EL MEDITERRÁNEO
Para mí, el mejor lugar del mundo. Es un ejemplo inmejorable de la belleza de la sencillez, de cómo conseguir mucho con poco y de aprovechar al máximo lo que tienes… y, al final, ser creativo es justo eso: sacar el máximo partido a tus recursos. El producto mediterráneo refleja ese enfoque, y los míos no son una excepción.