Situada entre Valldemossa y Deià en la pintoresca costa oeste de la isla de Mallorca, la casa se alza sobre un terreno empinado sobre S’Estaca, la histórica villa que pertenece a la leyenda de Hollywood Michael Douglas.
Es una posición espectacular en todos los sentidos, pero la casa, en la propiedad, no siempre ha estado a la altura de su sitio. Originalmente construida en el siglo XIX y ampliada durante el XX, terminando con un conjunto de ampliaciones y reformas muy mal concebidas en la década de 1990, la vivienda estaba en mal estado cuando los actuales propietarios la compraron.
El arquitecto Manuel Villanueva, de More Design, fue el responsable del proyecto de renovación que siguió: “Cuando nuestros clientes la compraron, estaba a punto de derrumbarse y legalmente fuera de norma” y, debido a que los estrictos códigos de construcción de la isla significan que una casa no se puede demoler por completo y construir una nueva estructura en el sitio, More Design tuvo que idear una solución arquitectónica que incorporara el volumen existente mientras también cumplía con las regulaciones y satisfacía las necesidades del cliente.
La solución fue “introducir una nueva estructura dentro del edificio existente, luego abrir algunos espacios y demoler otros”, dice Villanueva, explicando que el resultado fue “el mismo en términos de volumen pero un espacio interior completamente diferente”.
La casa también fue cuidadosamente “reconectada con el paisaje circundante de una manera que redujo su impacto ambiental”, agrega.
Foto: Greg Cox Realización: Tille Del Negro
Desde un principio, cuenta Villanueva, la casa fue “concebida como un diálogo entre extremos: por un lado, la ladera de la montaña con su predominio de los tonos verdes, marrones y anaranjados, la piedra y las encinas; y, por otro lado, el azul y la vista impresionante y sin obstáculos del Mediterráneo”.
La casa pertenece a dos familias que vienen aquí regularmente de vacaciones y cuenta con ocho dormitorios en suite, que están anclados por una sala de estar central que parece un museo o una galería.
More Design “concibió la finca con dos dormitorios diferenciados”, dice Villanueva, uno para cada familia. Uno de éstos está situado en los pisos superiores y el otro en el más bajo, y se comparte la parte central de la casa.
La sensación en los espacios comunes es dinámica pero urbana y silenciosamente sofisticada, con el espacio central de doble volumen, una parte especialmente encantadora de la casa. Los interiores, que fueron concebidos y ejecutados por More Decor, el brazo de diseño de interiores del negocio de More Design, también combinan atractivas texturas naturales con una elegante sensación de moderación.
Los suelos -hechos de piedra de Santanyí, un material de origen local- tienen una sensación lujosa. Envejecerán de forma natural y adquirirán una pátina única con el paso de los años
Materiales naturales adicionales, como madera, terracota, hierba tejida, cuero y lino, agregan más capas de profundidad y una sutil sensualidad. Ésta es una casa, dice Villanueva, “para una persona que busca un lugar tranquilo, que disfruta viendo pasar los barcos y el tiempo, pero que también tiene un enfoque contemporáneo del arte y la arquitectura”.
Nosotros añadimos que es una prueba positiva de que una casa de vacaciones puede ser un espacio sofisticado y contemporáneo, que, sin embargo, permite a sus ocupantes relajarse por completo.