Cuando la estilista y decoradora, Mar Gausachs, cayó rendida ante los cuencos en forma de galet – pasta tradicional catalana que se sirve con la sopa de Navidad – no dudó ni un segundo en que serían los protagonistas de su mesa navideña para 2023.
Abanderada de la originalidad y la sorpresa, Mar se ha desecho de los rojos y dorados, para dar una cálida bienvenida al blanco, al lila y al, ya conocido, verde. Una declaración de intenciones en toda raya, donde los neutros y la mezcla de estilos suman elegancia y espíritu navideño.
![la interiorista mar gausachs encendiendo una de las velas de the avant](data:image/svg+xml,%3Csvg xmlns="http://www.w3.org/2000/svg" viewBox="0 0 730 830"%3E%3C/svg%3E)
La interiorista Mar Gausachs encendiendo una de las velas de The Avant
Foto: Noémi Jariod Estilismo: Mar Gausachs
El mantel y las vajillas blancas representan el lado más clásico y tradicional de una mesa, mientras que los candelabros de Seletti y la fuente en forma de pez llenan de modernidad y diseño el estilismo. El resultado es una mesa tan atemporal como única, donde lo clásico y moderno conforman un tándem arrollador a prueba de todos los gustos.
Detalle de una mesa de Navidad decorada en tonos blancos y verdes
Foto: Noémi Jariod Estilismo: Mar Gausachs
Mezclar sin miedo
“El secreto para mezclar estilos, tanto en una mesa – como es el caso- como en una habitación, es usar una base blanca que te permita ceder el protagonismo a los elementos decorativos”, nos explica la estilista y decoradora. En este caso, el mantel funciona como un lienzo en blanco que sirve de hilo conductor entre todos los elementos. A su vez, confiesa que “escoger una paleta cromática común – como son el blanco y el verde- entre los objetos de diferentes estilos, facilita mucho la tarea”.
La mesa detalle a detalle