El lienzo en blanco sobre el que Beatriz Silveira ha intervenido con su proyecto de interiorismo y decoración no podía ser más cool que una edificación del prestigioso arquitecto Mario Kogan. Esta nueva construcción, con jardín y piscina, enamoró a sus compradores, principalmente por la luminosidad que ofrece y también por la invitación a una conexión in&out llena de sensaciones.

Es por ello que, a efectos estructurales, la vivienda no requería de ningún cambio, pero los espacios sí exigían el toque personal y estético alineado con los gustos y necesidades de los propietarios. En este sentido, la interiorista comenta que "la casa está llena de aciertos en su diseño y distribución y lo que nosotros buscamos fue aportar calidez a cada estancia, dotarlas de armonía, serenidad y clase, potenciando la luminosidad".

Salta a la vista la personalidad que desprende cada espacio de esta casa gracias al uso de materiales nobles y textiles sofisticados, con unos acabados de alta gama, sin olvidar destacar las obras de arte, las piezas de diseño y los muebles ideados por Beatriz Silveira. El resultado son atmósferas elegantes y serenas, gracias también a una selección cromática equilibrada.

Desde todas las estancias, la visión del exterior forma parte del proyecto de decoración, considerando el jardín visto a través de las cristaleras como si fuera un cuadro majestuoso con diferentes perspectivas, según recorres la casa. 

"El reto residió en gran medida en acompañar a la magnífica arquitectura de la finca, dejándola respirar, a la vez que le aportábamos calidez y recogimiento" _ Beatriz Silveira