Cuando los propietarios visitaron la propiedad, "lo que les gustó fue el terreno, no la casa", explican desde el estudio portugués Oitoemponto Architecture & Interiors. La prueba es que la intervención fue bastante significativa, dado que se demolió la vivienda existente y se hizo un proyecto nuevo completamente desde cero.

Hay que decir que la casa original databa de los años 80, tenía las ventanas muy pequeñas y los espacios eran muy reducidos. Los propietarios la compraron principalmente por su encantadora ubicación, entre el mar y el río, en la localidad costera de Aveiro (Portugal)

comedor tonos arena
Foto: José Manuel Ferrao Estudio: Oitoemponto

Autores también de su primera residencia en la ciudad

Otra de las motivaciones es que está a apenas 40 minutos de la residencia habitual que tienen en la ciudad. Así pues, el objetivo era "tener una casa bonita para los fines de semana, muy cómoda, fácil de usar y cerca de su ciudad natal", comentan Artur Miranda y Jacques Bec, fundadores del estudio, y autores también del proyecto de su casa en la ciudad.

cocina con isla en blanco y madera
Foto: José Manuel Ferrao Estudio: Oitoemponto

Estaba claro, pues, que con la satisfacción garantizada del trabajo realizado en dicho primer proyecto, los propietarios decidieron contactar de nuevo con el estudio, avalados también por la buena relación que conservan y los numerosos intereses que tienen en común. De hecho, Oitoemponto presume, en general, de tener un enfoque muy cercano a los clientes, reconociendo que "nos gusta lograr, en la medida de lo posible, una inmensa comprensión de sus necesidades y expectativas".

sala de estar iluminada con chimenea y escalera
Foto: José Manuel Ferrao Estudio: Oitoemponto

Un cubo arquitectónico de estilo ecléctico

Volviendo al origen de este proyecto, el estudio destaca que en el momento que visitaron el lugar juntos, y después de una breve charla, "no tuvimos que insistir mucho en la idea de hacer un proyecto totalmente nuevo". Y dicha idea estaba clara: una casa de líneas muy limpias, como un cubo, techos altos, grandes ventanas y dos materiales principales: ladrillos pintados de blanco y travertino, en una conexión transversal interior/exterior.

dormitorio cabecero dos materiales
Foto: José Manuel Ferrao Estudio: Oitoemponto

La decisión de volver a contar con el trabajo de Oitoemponto para su segunda residencia demuestra que a los propietarios les gusta el enfoque ecléctico que representa el estudio, marcado por la gran pasión que sienten por la arquitectura de mediados de siglo (años 30 a 70). "Nos gusta el lujo sutil, metropolitano y muy cómodo, con algunos toques de neoclasicismo y una especie de sensación ligeramente desgastada", opinan Miranda y Bec.

baño doble lavabo y suelo de rayas
Foto: José Manuel Ferrao Estudio: Oitoemponto

La arquitectura y decoración de apariencia audaz

El matrimonio, con un hijo de 20 años, amante del surf, son personas muy ocupadas, que viajan mucho y que aprecian la sofisticación sencilla, de ahí que aprecien mucho tanto la arquitectura como la decoración, formando parte de su estilo de vida. Es por ello que se hizo mucho hincapié en la apariencia audaz del interior y exterior de la casa, junto con una elección muy cuidada de materiales, arte, muebles diseñados e iluminación.

fachada blanca y exterior con piscina
Foto: José Manuel Ferrao Estudio: Oitoemponto

De todos los espacios de la casa, la sala de estar principal es el más apreciado por los propietarios, al igual que el spa exterior, que utilizan todo el año, y cuya solicitud de permisos fue costosa, dadas las normas locales sobre la protección de la costa, pero finalmente se pudo resolver.

"Después de 32 años de trabajo, definitivamente estamos más interesados en la forma en que funcionan las casa que en el color de las paredes" _ Oitoemponto