Sobre el cuarto de planchar, lo de necesario, todos sabemos que lo es, ya que en cualquier casa las tareas de planchar forman parte de la rutina doméstica. Otra cosa es que tengamos la suerte de poder asignarle un espacio propio. Todo va a depender de las dimensiones de la casa o del piso, claro, pero suele ir integrado en la zona de lavado/secado.

Lo de hacer que sea un cuarto práctico, va de la mano del propio concepto para el que se diseña este espacio. Nos ha de ayudar a organizar el trabajo de planchar y para ello hay que pensar bien lo que vamos a necesitar en el día a día y cómo se distribuyen los diferentes elementos que lo componen.

Y la cuestión de la discreción se relaciona con que el cuarto de planchar ha de pasar lo más desapercibido posible, pese a que su función es una de las prioritarias en cualquier vivienda. Es decir, no es una estancia para mostrar a las visitas (porque los retrasos de ropa se suelen acumular), pero sí es cierto que hay que procurar tener un cuarto de planchar ordenado.