La madera con efecto natural parece estar conquistando los espacios más vanguardistas este año, especialmente cuando hablamos de las cocinas. Prueba de ello es, por ejemplo, el último trabajo que hemos publicado de la interiorista Silvia Trigueros, de la renovación total de un piso de los años 40 en el barrio madrileño de Salamanca. En este caso, vemos que se ha elegido la madera como material principal para la pequeña cocina abierta, pero no cualquier madera. Como se puede apreciar, la madera muestra vetas y una textura que nos recuerda un estilo más rústico. Y es que las cocinas pequeñas ya no necesitan ser totalmente blancas y ahora se busca algo más artesanal y acogedor, recuperando la esencia de la estética de las cocinas de antaño, como las de nuestras abuelas.
El regreso de la madera en las cocinas más auténticas
Es cierto que hasta no hace mucho el blanco era el color predilecto para aportar amplitud visual a las cocinas pequeñas, pero actualmente las tendencias y estilos que más triunfan buscan una conexión más emocional. El uso de la madera natural, con sus tonalidades propias, es una prueba de ello, pues aporta una calidez que conecta directamente con la tradición. Además, los acabados con vetas visibles añaden autenticidad, con tonos cambiantes sobre la superficie, que logran un estilo más relajado e informal; como si cada imperfección contara la historia de ese hogar.
Por otro lado, este material también consigue crear una atmósfera mucho más cercana y acogedora, comparada con la neutralidad que aporta el blanco. Esta vuelta a materiales tradicionales y menos trabajados responde al auge de la filosofía Wabi-sabi, que celebra la belleza de la imperfección, lo artesanal y la simplicidad.
¿Qué es el estilo wabi-sabi?
En el estilo Wabi-sabi, popular en Japón, los espacios tienen un aspecto acogedor y rústico, donde la madera sin tratamientos es la protagonista. Además, la filosofía wabi-sabi valora mucho la asimetría y los elementos que reflejan el paso del tiempo, por lo que el mobiliario de madera, si muestra ligeras marcas, es aún más apreciado. De este modo, los elementos artesanales, rústicos o reciclados pasan a ser más valorados por su autenticidad.
El interés por la madera natural también responde a la necesidad de la sociedad actual de buscar materiales más sostenibles y duraderos, aspectos que también defiende el estilo japonés citado anteriormente. La madera es un recurso renovable, y cuando se elige de origen certificado y de gestión responsable, se convierte en la mejor opción para ser más respetuosos con el medio ambiente. Asimismo, su durabilidad y la posibilidad de repararla o renovarla la hacen una alternativa ideal para quienes desean reducir su impacto ecológico y ahorrar a largo plazo.
Cocinas funcionales con estantes abiertos
Para quienes buscan sacar el máximo partido a cocinas pequeñas, los estantes abiertos son una opción excelente que también están de moda. Esta solución permite mostrar las vetas de la madera en toda su extensión, dejando que el material se convierta en protagonista del espacio. Además, los estantes abiertos son ideales para organizar elementos básicos y decorativos de forma visible, aportando un toque de orden y funcionalidad.
Esta idea se inspira en el concepto de “cocina vivida”, donde se exhiben los objetos y utensilios que se usan con frecuencia, creando una atmósfera personalizada y práctica a la vez. Así, las cocinas pequeñas logran un efecto visual cercano, pero sin perder la parte funcional que necesitamos en esta estancia de la casa.
Si te gusta un estilo más tradicional y recuerdas con añoranza y ternura, la cocina de tu abuela son síntomas de que la filosofía Wabi-sabi y la madera natural pueden encajar contigo y en tu casa. Aunque tengas una cocina pequeña, el blanco ya no es la única alternativa, y como has visto, con la madera natural puedes conseguir una estancia más hogareña sin renunciar, al mismo tiempo, a un espacio moderno y funcional. ¡Abraza el Wabi-sabi y la belleza más imperfecta!