El diseño de esta casa está pensado para capturar la esencia de la luz natural, que fluye a través de los espacios de manera orgánica, generando una atmósfera tranquila y envolvente. Y este concepto es una constante en cada una de las estancias, formando un todo que respira serenidad, calidez y conexión con su entorno. ¿Entiendes por qué el proyecto se ha bautizado con el nombre de Aura, verdad?
Y su autora, la interiorista Andrea Diego, te responde con estas palabras: "Aura no es solo un hogar, sino un refugio donde los materiales naturales, los tonos suaves y las líneas puras se combinan para lograr un equilibrio perfecto entre funcionalidad y belleza. Cada rincón ha sido cuidadosamente diseñado para resonar con la calma y el bienestar que se busca transmitir".
El diseño del salón invita a parar y disfrutar
En la zona de día se respira calma gracias a sus líneas limpias y a las formas suaves que envuelven el espacio. Además, su distribución ha sido especialmente cuidada desde el primer boceto del proyecto, haciendo que el salón se organice en torno a un mueble central que articula el área de estar con la cocina, creando un espacio abierto pero con las zonas claramente definidas.
"Este espacio es elegante en su simplicidad, donde cada elemento cumple una función sin restar belleza al conjunto", explica la interiorista. Y el uso de luz indirecta destaca las formas suaves del espacio, realzando el equilibrio entre lo moderno y lo confortable, mientras que los tonos cálidos siguen reforzando la sensación de envolvimiento y calma.
Una cocina que inspira bienestar
El doble paso hacia la cocina resulta suavemente tentador e invita a descubrir un espacio para disfrutar y compartir en un ambiente tranquilo y acogedor, realzado por el uso de los materiales naturales, como la piedra y la madera. La organización del espacio también ayuda mucho, ya que se ha pensado para facilitar la vida diaria, con una distribución limpia y funcional.
Como sucede en el salón, aquí también, la luz natural fluye con libertad a través de las ventanas inclinadas, conectando el interior con el exterior.
En cuanto a la gama cromática neutra seleccionada para los textiles y el mobiliario de toda la vivienda, basada en tonos tierra, lino y beige, se entrelaza con la luz cálida indirecta que inunda los espacios, actuando de potenciador de la atmósfera envolvente general.
"Este proyecto es un refugio sereno y sofisticado, donde cada rincón está diseñado para ser vivido y sentido" _ Andrea Diego