Es raro que conozcas a una persona que sea discreta, madura, delicada, responsable y no sea al mismo tiempo una persona con un orden meticuloso (tampoco sin llegar al extremo) en su vida profesional, personal y también en su propia casa. Para todo hay excepciones en la vida, pero de normal a estas personas les hace feliz tener su casa bien organizada, sin suciedad, con cada cosa en su sitio y con las estancias haciendo gala de una limpieza visual. Y lo hacen sin llamar la atención, sin contarlo y de una forma casi secreta. 

De esta manera, teniendo todo en su sitio, ganan en tiempo libre que pueden dedicar para otras muchas facetas de su vida con las que disfrutan al máximo. Y no, no se trata de algo complicado de replicar si tú también quieres lograrlo.

Las personas más ordenadas y felices dedican pocos minutos al día (eso sí, lo hacen cada día sin saltarse ninguno) a dejar todo impoluto y organizado. Basta con seguir estos hábitos sencillos (ya desvelados) como nos explica la interiorista Laura House Coach @laurahousecoach; ella misma se encarga de ayudar a esas personas que buscan la felicidad en estos pequeños detalles decorando, diseñando o adaptando los espacios de su hogar. 

La casa de toda persona ordenada

La casa de toda persona ordenada

Foto: Fhe.es Realización: Paloma Pacheco Turnes

Desvelados los hábitos secretos de las personas más ordenadas

No nos ha costado que esta profesional del interiorismo más consciente nos ofrezca las pautas y secretos que tienen en común las personas más ordenadas y, por tanto, con más tiempo libre y más felices por invertirlo en lo verdaderamente importante (y no, esto no es ordenar los cajones de la cocina). 

  • Lo tienen todo organizado por listas

Pero no de una manera de andar por casa en el primer trozo de papel que pillen como si de una lista para ir al supermercado se tratase. Estas personas son organizadas hasta para hacer listas, nos explica esta coach del orden, y para ello emplean tablas de Excel de sus pestañas, sus columnas y sus filas. Una meticulosa organización en forma de tiempos, tareas, citas o compromisos, economía del hogar y otras categorías. Te puede parecer a simple vista un tanto locura, pero verás la satisfacción que da el ir haciendo cosas de la lista y tacharlas cuando se han completado. 

Ordenar el baño: hecho

Ordenar el baño: hecho

Foto: Montse Garriga
  • No se van a la cama sin antes recoger 

Sabemos que tras un largo día de trabajo es una pereza ponerse ya de noche cuando se está cansado a recoger el baño tras la ducha, la cocina con los platos de la cena o el salón donde se acumulan revistas y mantas. Pero, si te das cuenta y tienes algo de fuerza de voluntad, dedicar estos minutos antes de ir a dormir para dejar todo listo solo te traerá cosas buenas.

Y al levantarse lo mismo, nada de salir corriendo para la oficina sin antes ventilarhacer la camarecoger la habitación y las cosas del desayuno. Todo despejado y ordenado. 

Nada de irse a la cama y dejar los restos de la cena

Nada de irse a la cama y dejar los restos de la cena

Foto: Interiorismo: Estudio Deca Foto: Erlantz Biderbost
  • Son fieles seguidores de Marie Kondo a la hora de doblar la ropa 

Y lo que no son prendas de ropa. Manteles, mantas, fundas de cojín, servilletas, bufandas... todo encuentra su sitio perfecto si se dobla en forma vertical. Como recuerda en muchas ocasiones la gurú mundial del orden, con este método las cosas ocupan mucho menos y además se puede ver todo de un simple vistazo para no perder tiempo si estás buscando una prenda en concreto. 

Todo bien doblado en vertical

Todo bien doblado en vertical

Foto: iStock