Las piezas artesanales se han convertido en un objeto de deseo cada vez más buscado y deseado en el mundo del interiorismo. Aportan calidad y calidez a la decoración y, a su vez, contribuyen a una tradición muy arelada a nuestro país.

La artesanía forma parte del ADN de la cultura y tradición española. Desde la alfarería, hasta los cestos de mimbre hechos a mano, pasando por el arte de trabajar el cuero. En Interiores queremos rendir tributo a nuestros artesanos y por eso hemos recopilado algunos de los grandes maestros, así como nuevos talentos, del mundo de la cerámica. Hoy nos centramos, como bien dice el título, en el arte del barro, una tradición milenaria en nuestro país.

 

5 maestros artesanos del barro y la cerámica

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bas al servicio de la naturaleza
Plantcloud de Bas, una maceta colgante con sistema de riego y vaciado de agua

Bas, al servicio de la naturaleza

Ceramistas artesanos especializados en el diseño de macetas para plantas de interior, Bas es fruto de la pasión de Alicia Bas por la cerámica. Tanta que en el año 1970 estableció su taller en Barcelona y comenzó a trabajar la arcilla y, después de un largo recorrido pasando por diversas fases creativas, en 2013, con la iniciativa de su hija, Xènia Bas, pusieron en marcha el proyecto Bas.

 

Bas, al servicio de la naturaleza2
A la izquierda, el modelo Straum, que recoge el agua del riego (obra de Xènia Bas). A la derecha, Essential cuya estructura protege a la planta del exceso de luz

 

Este taller de cerámica se nutre del saber hacer de la cerámica artesanal y del trazo preciso del diseño contemporáneo. ¿Su objetivo? Realizar macetas dignas para las plantas, piezas que dejen de ser simples contenedores para convertirse en cunas donde la naturaleza se sienta acogida. De esta manera, la planta y la maceta forman un conjunto que participa en la composición del espacio cotidiano.

Su obra se adentra en el universo de la sostenibilidad, la economía circular y el amor por nuestro planeta, a lo que añaden: “Necesitamos rodearnos de belleza, de objetos que nos transmitan paz y sosiego, desde nuestro trabajo artesano, cuidamos de todos los detalles, en cada pieza que elaboramos con nuestras manos queremos imprimir un poco de este espíritu”, aseguran.

"La incorporación del diseño al oficio artesano reinventa nuevos procesos de elaboración y aporta una mirada fresca a la sutil imperfección del trabajo hecho a mano".

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Lámpara Barbutina de VO Estudi

VO Estudi, diseño y artesanía

De formación como diseñador industrial, Víctor Olmedo, de VO Estudi, nos habla de su proyecto desde hace dos años como ‘ideador’ de nuevos productos realizados artesanalmente: “El objetivo es co-crear con los artesanos piezas cargadas de valores que evoquen recuerdos de otras artesanías más tradicionales, ya sea a través de los materiales, sus acabados, formas etc.”.

 

VO Estudi, diseño y artesanía
Izquierda, lámpara Barbutina, una luminaria de sobremesa de cerámica color terracota y esmalte blanco. Arriba, derecha, lámpara Majolic, de formas geométricas que aportan relevancia a la pintura artesanal; debajo, lámparas de semiesferas.

 

Para ello, se ha aliado con la ceramista Nuria PieMarc VidalJulio Badajoz o el maestro artesano alfarero Josep Papaseit (de Ceràmiques Miravet). Fruto de esa unión surgen creaciones muy singulares, entre las que destaca Barbutina, torneada por Josep Papaseit y con la que se rinde homenaje a la técnica del torno cerámico –de ahí que sea una pieza que no pueda reproducirse con otros procesos–.

 

"Josep Papaseit sigue el método tradicional de elaboración del barro. Aunque también experimenta con nuevas ténicas". 

 

Del mismo artesano, Olmedo nos habla de una lámpara, pendiente de bautizar, realizada con barro rojo y chamota; la idea de esta es ser un producto sencillo con un estilo rústico muy marcado; también Majolic, un diseño inspirado en la técnica majòlica, que tanta importancia tuvo en Cataluña y que hoy apenas se utiliza. Se trata de una pieza torneada y esmaltada por Nuria Pie. Todas ellas reivindican la artesanía tradicional volcada en un universo contemporáneo.

pott project historia y tradicion
Iluminaria Calo de Pott Project, que recoge la tradición campesina de los botijos

Pott Project, historia y tradición

Detrás de nuestros productos hay un artesano, una historia y una tradición”, comenta Miguel Ángel García Belmonte, fundador y CEO de Pott Project, un diseñador industrial crecido en Totana, una pequeña población con una gran y antigua tradición alfarera. Hace seis años puso en marcha este proyecto y lo hizo a raíz de su relación personal con el entorno y su herencia cultural, decidiendo empezar a desarrollar productos de diseño contemporáneo y atemporal a base de materiales naturales y técnicas tradicionales, aprovechando que los mejores talleres de artesanos estaban en la zona.

 

Pott Project, historia y tradición2
Derecha, Totana, de Isaac Piñeiro. A la izquierda lámpara de sobre mesa Okina de Martín Azúa, del mismo autor, abajo, izquierda, lámpara Okina de techo

 

 “Una vez que la función está definida, intentamos solucionar los posibles inconvenientes que entraña trabajar con un soporte como es el barro”, cuenta. Y, dado que los procesos tradicionales se comportan en simbiosis con la transformación orgánica, la alquimia de los materiales naturales, cada pieza acabará siendo única. Es más, entre los objetos que crean, Miguel asegura tener como misión en ellos preservar la conexión emocional que generan las piezas artesanales; mantener las tradiciones, el tejido humano y la sensibilidad que de ello se deriva; promover aquellas cosas hechas por la mano del hombre; e impulsar la creación de valor aunando visión (diseño) y conexión humana (artesanía).

 

"Nuestros objetos están dirigidos a todas las personas que valoran el diseño hecho por la mano humana".

- Miguel Ángel García Belmonte, fundador y CEO de Pott Project

marre moerel ceramicas de inherente belleza
Iluminarias Estetoscopio de Marre Moerel

Marre Moerel, cerámicas de inherente belleza

De su pasado punk en Londres le queda el no aceptar jamás reglas impuestas. Y su “no sé si hago escultura o diseño. Y me gusta no saberlo” es una especie de ‘pienso, luego existo’ personal. Haga lo que haga, lo que está claro es que esta holandesa afincada en Madrid ha promocionado el diseño y la artesanía en nuestro país como pocos creadores.

 

Marre Moerel, cerámicas de inherente belleza2
A la izquierda colección de vajillas: Playing with Blue. A la derecha candelabros Faro; sobre ellos dispensador de agua Fonte

 

Premio a la Influencer del Año 2015 por la revista Interiores, es una de las creativas que pisa fuerte en nuestro país. Su aspiración siempre ha sido crear objetos contemporáneos atemporales, que sean capaces de fusionar el sentir actual con las referencias históricas sin perder el sentido del humor y su delicadeza inherentes a cada una de ellas.

Su propia línea de productos se centra en la cerámica realizada a mano, con la que pretende expresar la innata belleza de este sencillo material que tiene una enorme capacidad sensorial, capaz de cambiar la carga emocional de los objetos que realiza. Es una artista que trabaja con pasión sus proyectos personales, desarrollando y promoviendo sus líneas de mobiliario, iluminación, vajilla y accesorios. En su tienda Marre Moerel Design Studio en Malasaña conviven de forma habitual las colecciones de producción con las piezas únicas y las ediciones limitadas.

tito ubeda saga de maestros alfareros
Tito Úbeda

Tito Úbeda, saga de maestros alfareros

Desde el abuelo Pablo –maestro en alfarería tradicional–, el padre Juan –apodado Tito; nombre que quedó como sello familiar–, visionario y creativo, y actualmente el nieto, Juan Pablo – que lleva las riendas del taller –, esta saga de alfareros son una muestra de cómo estos maestros de la cerámica han sabido hacer perdurar el oficio, dar valor al trabajo de sus manos y enriquecer la alfarería con otra mirada.

 

Tito Úbeda, saga de maestros alfareros artesanal
Arriba, Juan Pablo Martínez ‘Tito’, el actual maestro al frente del alfar con algunas de sus piezas

 

Cuando Juan ‘Tito’, en los años sesenta, intuyó que la entrada de nuevos materiales, como recipientes de plástico, amenazaba con acabar con el oficio de alfarero, tuvo la audacia de reconvertir las piezas que salían de su alfar, Alfarería Tito, en objetos con valor decorativo, no sólo útiles, buscando nuevos colores y formas de hacer, inspirándose continuamente y renovando sus creaciones, coleccionando ávidamente piezas en desuso y modelo de otros talleres que cerraban, para no permitir que cayeran en el olvido y se sumó a proyectos, colaboraciones cinematográficas y nuevos retos... Un giro marcado por su visión moderna y personalidad.

Hoy forman parte de la historia de la alfarería española. Con un sello personal, han sabido respetar la tradición y la artesanía, a la vez, adaptarse a las necesidades y gustos del siglo XXI.