La distancia entre Finlandia y Mallorca apenas importa cuando sabes, que al llegar a la isla, te espera un apartamento como este, de tonos tan relajantes y, por supuesto, con una terraza espectacular frente al mar. Es la herencia que al actual propietario le dejaron sus padres, quienes lo compraron hace más de 30 años y que ahora él disfruta de forma puntualmente como vivienda vacacional.

El apartamento está situado en un complejo residencial concebido como un poblado de estilo mediterráneo, con sus elementos característicos de la época, como la balaustrada y la cubierta árabe, que debían respetar. Por tanto, la reforma que llevó a cabo el estudio Jaime Salvá Arquitectura & Interiorismo se centró en el diseño interior, conservando la esencia de la arquitectura local pero dándole un toque más actual.

 

Los atardeceres sobre el mar desde la terraza son uno de los atractivos de este apartamento de Mallorca.

Los atardeceres sobre el mar desde la terraza son uno de los atractivos de este apartamento de Mallorca.

Foto: ©Marie-Caroline Lucat

La vivienda, de 110 metros cuadrados, consta de una estancia abierta abierta al mar donde se ubican la cocina, el salón y el comedor, dos aseos, dos habitaciones dobles con baño en suite, dos habitaciones con baño compartido y una sala de estar, sin olvidar la terraza con vistas a las islas Malgrats, situadas en la costa suroeste de Mallorca.

Dada la procedencia de los propietarios, el estilo nórdico está muy presente en la vivienda, fusionado, obviamente, con el mediterráneo, una idea que se consigue gracias al uso de materiales locales aplicados a conceptos de la arquitectura escandinava.