Si para la educación de tus hijos quieres un modelo educativo que de el protagonismo al niño y al aprendizaje que este haga en un entorno de estímulos, de creatividad y de autonomía, sin duda el Método Montessori es una opción perfecta. Una corriente que puedes aplicar al cuarto de los niños como te explicaremos.
Pero, antes te desvelamos que todo nace de la creadora de este método, María Montessori, que era una médico y pedagoga italiana que inició una pedagogía alternativa después de observar durante muchos años el comportamiento infantil en el aula.
LAS CLAVES DE UNA HABITACIÓN INFANTIL MONTESSORI
Que favorezca la autonomía. Todo lo que sea aprender y jugar debe estar a su altura y a s alcance para que pueda ser más autónomo e independiente. Lo mismo pasa con sus libros, su cama, su ropa, sus zapatos... Lo mejor en este caso son armarios y estanterías de pequeño tamaño y que estén a la vista si es posible.
Todo seguro. Si quieres que la habitación de tu hijo sea Montessori al 100 %, es el momento de ir guardando los objetos cortantes, punzantes o que puedan ser peligrosos ya que se pueda hacer daño en un momento dado al querer hacerlo todo solito. Y mejor nada de puertas, cajoneras y aperturas complicadas. Como hemos dicho antes, todo a la vista y sencillo para facilitarles ese descubrimiento y ese aprendizaje.
Explorar, conocer, observar, jugar, descubrir... Esta filosofía insiste en que hay que dejar que los niños aprendan jugando, miren, observen, se dejen guiar por sus emociones, sus instintos... Por eso es crucial que la habitación Montessori invite a que lo hagan todo ellos sin demasiada ayuda. Solo estarán los padres atentos por si pasa algo o necesitan algo.
Un espacio con pocas cosas. Nada de volver locos a los niños en un cuarto con millones de cosas y de juguetes. Lo mejor es una habitación sencilla con lo imprescindible y donde haya un espacio libre para que jueguen. Y para los colores, lo mejor son los tonos que dan un ambiente tranquilo como es el caso de los tonos beige, blancos, grises, y sobre todo, lo natural.