Forma parte de una de las sagas familiares más conocidas del país. Hija del controvertido tertuliano de televisión, Kiko Matamoros, y sobrina de la modelo Mar Flores, poco a poco nuestra protagonista se ha ido haciendo un hueco en los programas de televisión y en las revistas del cuore. Laura Matamoros, que empezó formando parte de realities y ha sido colaboradora en numerosos espacios televisivos, desde hace un tiempo tiene encaminada su vida personal y profesional hacia la creación de contenido en redes sociales.
Además de su trabajo diario en eventos y colaborando con todo tipo de marcas comerciales, en la última semana Laura Matamoros ha vuelto a la escena al desvelar la relación que ahora mantienen con un joven empresario. Es la primera vez que la joven madrileña se aventura a ponerle nombre y rostro a una pareja tras su reciente separación del padre de sus dos hijos pequeños. Cosas del corazón aparte, a nosotros lo que nos gusta es entrar de lleno en su vida y más concretamente en su hogar para ver cómo es la casa y cómo vive Laura Matamoros.
El salón de la casa de Laura Matamoros
Aunque navegando por los distintos post de su perfil de Instagram hemos podido ver imágenes de su cocina, su cuarto de baño o su dormitorio, la estancia que más se repite y donde Laura y sus dos hijos hacen la mayor parte de la vida es el salón. Una estancia que se ha vuelto protagonista gracias sobre todo a un enorme espejo que preside una de las paredes y donde la joven comparte cada día su look de ropa.
No obstante, no solo esto nos ha llamado la atención en su hogar. Este salón está decorado con piezas que parece que no tienen nada que ver entre sí. Combinaciones imposibles donde el blanco y la madera ocupan buena parte del espacio, pero, que sorprendentemente, funcionan para dar un estilo de lo más ecléctico, actual y personal a todo el conjunto.
Así, vemos un amplio sofá tapizado en tonos crudos frente a una chimenea de obra de diseño, una mesa de comedor en mármol con aires más clásicos, el mencionado espejo con un marco dorado más barroco y hasta un cuadro de vivos colores y a la última vanguardia pictórica. Pero no solo eso, también hay hueco para lámparas y sillas de comedor que nos lleva a la década de los 60 y hasta una librería de madera que se ha colocado de lado para hacer las veces de una alargada y baja mesa auxiliar. Lo repetimos, es curioso, pero el resultado estiloso está bien logrado.
El resto de la casa
Este salón forma parte de la vivienda donde la joven de 31 años vive a las afueras de Madrid con un diseño de lo más moderno y actual y donde ella misma ha participado activamente y se ha implicado en la decoración de las estancias. Espacios abiertos y conectados, dos plantas y hasta un porche de grandes dimensiones y desde donde la influencer (y su ahora estrenada nueva pareja) no se pierden ni uno de los bellos atardeceres que se asoman por la naturaleza que rodea su casa.
Precisamente, la calma que rodea a la vivienda no solo entra en el salón por los grandes ventanales, sino que se ha replicado en una cocina con mucho almacenamiento y muebles de madera, un baño en tonos claros y con mucha luz y un dormitorio principal donde los colores calmados, suaves y poco estridentes consiguen dar una sensación de verdadero hogar.