Ya hace tiempo que las mamparas pasaron a ser piezas imprescindibles en el cuarto de baño. ¡Y es que lo tienen todo para triunfar!
Por un lado, una elevada estanqueidad que protege de molestas salpicaduras de agua. Y, por otro, una mayor seguridad gracias al vidrio templado securizado, a lo que se suma su infinita adaptabilidad a todo tipo de espacios y estilos –sobre todo, los modelos a medida–.
Sin olvidarse del alto poder decorativo que le proporcionan sus perfiles de acabados y colores diversos. Ni de que son cada vez más fáciles de limpiar, ya que incluyen tratamientos que evitan que la cal y la suciedad se depositen en su superficie.
En definitiva: las mamparas se han convertido en auténticos objetos de deseo en el baño.
13 mamparas de ducha que triunfarán este 2024