Cómo incorporar la lavadora en un cuarto de baño pequeño sin perder estilo y con la madera en el foco

Si pensamos en una zona de casa que nos aporte relajación, lo más probable es que pensemos en nuestro cuarto de baño. Pocas cosas hay mejores que darse una ducha caliente con una luz tenue o unas velas e incluso con una música sosegada de fondo. Parece que en una zona que invita a la desconexión no sea apropiado incluir la lavadora, pero te adelantamos que sí, se puede, y que, además, queda bien y es una posible solución para un hogar de tamaño reducido que no permite colocar este electrodoméstico en la cocina o disponer de un cuarto para la colada.

Podemos añadir nuestra lavadora en esta estancia sin ningún tipo de problema, sumando funcionalidad, e incluso sumando estilo con una planificación. La clave: el equilibrio entre funcionalidad y diseño, algo que conocen a la perfección en Jesús del Ser, empresa especialista en el tratamiento y fabricación artesana de madera, ya que han creado un proyecto con estas características que logra lo que estábamos buscando.

Un mueble-lavabo ideal para tu lavadora

Jesús del Ser cuenta con una experiencia de más de 40 años y es precisamente esta experiencia lo que les ha llevado a crear un mueble-lavabo a medida en madera que permite integrar a la perfección la lavadora, y que dispone de mucho almacenaje.

El proyecto soluciona, de este modo, el problema de dónde colocar la lavadora si no tenemos suficiente espacio. Nuria del Ser, gerente de Jesús del Ser, nos explica que para diseñar el artículo tuvieron en cuenta "las preferencias del cliente y un equilibrio entre funcionalidad y estética".

También nos detalla que consideraron que lo mejor para añadir la lavadora en este elemento del mobiliario era "esconderla a simple vista e instalar una encimera continua con lavamanos integrado, creando una unidad integrada y funcional".

Un diseño bien planteado

El mueble a medida se pensó como un armario con puertas y con un cajón bajo de buenas dimensiones para almacenaje, y que también fuera a conjunto con el entorno del baño y del hogar. Se completó con una encimera corrida de piedra natural de Travertino, para un mayor aprovechamiento del espacio.

La madera DM hidrófugo, resistente al agua y la humedad, es la empleada en el mueble, en grosor de 15 para las partes traseras y de 19 mm para la estructura y frentes de armario y cajones. Además, la madera está tratada con un lacado liso en tonalidad verde grisácea, una paleta de color que no desentona con el resto del espacio. Tal y como define Del Ser, se trata de "un color claro y neutro, muy elegante, que contribuye a crear una sensación de amplitud y limpieza".

Por último, se agregaron unos tiradores minimalistas en color metal, en concordancia con la grifería, un detalle que aporta elegancia y sobriedad a la pieza.

Madera y humedad, el fin de una enemistad

La madera en el baño produce un área especial y acogedora repleta de elegancia, funcionalidad y calidez. Con estas cualidades que es capaz de aportar en el cuarto de baño, se está convirtiendo en una tendencia incluirla en estos espacios, de modo que se enfrenta a la humedad y al agua, conocidos desde siempre como sus antagonistas.

Ya no suponen un problema, puesto que los avances tecnológicos han permitido crear tratamientos de la madera que hacen que este material tan natural sea muy resistente al agua y perdurable en el tiempo, haciendo posible que pueda ser parte del baño.

La especialista hace especial mención a materiales como la teca, el cedro y el roble tratado, ya que aguantan muy bien la humedad y los cambios de temperatura, de modo que son geniales para muebles, así como para revestir paredes y pavimentos. Del Ser señala también que "es un material muy versátil para crear espacios acogedores y puede ser un excelente aislante térmico y acústico, dependiendo de la densidad de la madera".

La labor de Jesús del Ser

Jesús del Ser es una empresa familiar, creada en 1979, que se centra en producir madera con acabados a la carta y a medida, y se focaliza en tarimas macizas y flotantes, en más de 22 variedades distintas para interiores y exteriores.

Actualmente, la empresa suma más de 12.000 metros cuadrados entre fábrica, secadero eléctrico, secaderos de oreo, naves de almacén, aserradero, almacén de maderas, etcétera. Su éxito reside en su labor hecha a medida, su trato exclusivo con el cliente y su fabricación nacional, con un control de todo el procedimiento. Conocen en profundidad las maderas, de manera que incluso asesoran y recomiendan las que resultan más adecuadas a cada proyecto.