¿Tienes un recibidor muy pequeñito? Lo cierto es que no te culpo, la mayoría de los mortales vive en pisos en los que los constructores decidieron que el recibidor o no existiera o fuera minúsculo. Si este es tu caso, no te preocupes, porque hoy voy a ayudarte a sacarle partido a tu pequeño recibidor a través de la decoración y trucos sencillos de aplicar.
Como sacarle partido a tu pequeño recibidor
Vale, vamos al lío. Si yo tuviera un recibidor pequeño, comenzaría haciendo una lista de todo lo que necesito. Por ejemplo, agregaría un espacio donde dejar los zapatos, otro donde dejar las llaves, otro para el bolso, otro para las mochilas del cole de los niños… Seguramente también me decantaría por perchas, armarios o pomos donde dejar la ropa y, sin duda, añadiría, si pudiera, una descalzadora o un puf donde sentarme a quitarme y ponerme los zapatos.
Me encantaría tener una zona donde dejar todas esas cosas que deben salir de casa, como por ejemplo los paquetes que tengo que devolver o la bolsa de ropa para donar. Y, sin duda, necesitaría un espejo donde mirarme y un lugar donde dejar pañuelos, guantes, gorros o pilas y bombillas. ¡Ah!, y claro, como yo vivo en Asturias, es imprescindible un lugar donde posar los paraguas.
Como tengo niñas, pues además del sitio de las mochilas, también me vendría de maravilla una zona donde dejar las notas de los profes y el calendario escolar, además de los horarios de los buses.
Y, para terminar, como soy interiorista, voy a necesitar algún espacio donde dejar las llaves de las viviendas que estoy reformando, donde recepcionar pedidos que vienen a casa en vez de ir al estudio o donde posar el metro láser y el normal cuando vuelvo del trabajo.
Ahora bien, con todas estas premisas, ¿cómo vamos a meterlo todo en un pequeño recibidor?
¡Sí SE PUEDE!
Aunque tu recibidor se componga de una sola pared, lee bien, una sola pared, puedes crear un sistema que haga que tu entrada se vea ordenada y que sea útil a su vez. ¿Cómo? Con un Command Center.
Un command center es literalmente un centro de mando, es decir, un lugar donde se aglutina el centro de mando de la vivienda como si de un espacio militar se tratase. Este espacio suele ser vertical y estar anclado a una pared, así que tener solo una no es que no sea malo, sino que, en este caso, es perfecto.
Compondremos nuestro command center de aquellas cosas que salían en la lista elaborada previamente.
Un pomo o varios
para dejar las mochilas y el abrigo.
- Un banquito: en el que dejar bolsos y sentarnos para calzarse y descalzarse.
- Un pequeño zapatero: donde meter el calzado al llegar a casa.
- Una cesta colgada: para poder dejar en ella las pequeñas cosas como esos paquetes o el metro del que hablaba antes.
- Un calendario: en el que poner las tareas pendientes.
- Una zona donde escribir que puede ser una pizarra o un rollo de papel con boli enganchado: para poder dejarle notas a la familia o dejar anotada la lista de la compra.
- Una balda con un vaciabolsillos: o unos pequeños ganchos donde colgar las llaves.
- Un paragüero y extras.
- Con un bonito reloj nunca volverás a llegar tarde
Y también podemos añadir un panel donde ponerlo todo que nos sirva para tapar las horribles instalaciones que siempre nos colocan en la entrada.
¿Ves que hemos compuesto una zona superelaborada en poquísimo espacio? A eso añádele un espejo, aunque sea pequeñito, donde mirarte antes de salir de casa, una lámpara que puede ser tipo aplique, para tener una luz que se encienda al oscurecer y al amanecer sin tener que encender todo el pasillo y, para terminar, ubica una o dos baldas a altura elevada donde colocar cestas que tengan el almacenaje de los pañuelos, las pilas y las bombillas. Pon una planta colgante en la balda para dar sensación de hogar, añade una alfombra cálida y lo tienes. Tu command center completo, bellísimo y superútil.
Y ahora que ya sabes todo lo que necesitas, ¿cómo estás haciendo tu lista?