El papel pintado es una buena manera de aportar color, calidez y singularidad al cuarto de baño. Desde 2022 se habla cada vez más del papel pintado como un recurso para decorar el baño y personalizarlo, pero ¿es una tendencia en decoración que seguiremos viendo en 2025 y 2026 o tiene los días contados? Laura Laviña, cofundadora junto con Olga Alonso del estudio de interiorismo Diseño Interior Bruto, cree que, pese a que en el baño el papel pintado se está integrando de forma más tímida que en otros espacios del hogar, “es una tendencia que va a dejar de serlo para convertirse en una opción habitual a medida que los usuarios se acostumbren a verlo”.
Por qué el baño (sobre todo si es pequeño) es un buen lugar para usar papel pintado
Definitivamente, el papel pintado va a seguir conquistando los baños y aseos de nuestras casas en 2025. Es una forma de aportar al baño el look setentero que está de moda en la decoración del hogar. Sobre todo en cuartos de baño pequeños, el papel pintado es un excelente recurso para aportar singularidad y transformar su aspecto de arriba abajo, aunque según Laviña “puede resultar algo agobiante”. En este sentido, y para matizar esa sensación y conseguir mayor equilibrio visual, siempre se puede optar por panelar la parte baja de la pared, por ejemplo.
En alguna ocasión también hemos comentado que, en general, en espacios pequeños sí es buena idea arriesgar con el color porque aporta profundidad visual. En ese sentido, un papel pintado de estampados atrevidos es una buena opción en baños pequeños porque, al no ser un espacio principal de la vivienda, da menos miedo experimentar con él porque se puede cambiar fácilmente. En todo caso, las expertas consultadas especifican que, en cuartos de baño pequeños donde se concentre mucha humedad o la ventilación no sea buena, no debe usarse nunca; así como tampoco en zonas de bañeras o duchas en las que el papel esté en contacto directo con el agua, en cuyo caso conviene optar por el azulejo.
Las opciones para decorar el baño (o el resto de la casa) con papel pintado se han multiplicado
Desde Diseño Interior Bruto opinan que el aumento del interés por el papel pintado en los últimos años como recurso decorativo en el baño tiene que ver con que se ha pasado de una oferta limitada, en la que imperaban los motivos clásicos, florales o a rayas, a otra “casi ilimitada” con multitud de estilos, motivos, colores y texturas. Ahora, “las opciones para decorar se multiplican y eso proporciona a los profesionales muchas posibilidades para crear espacios que se desmarcan de lo habitual”, continúa Laviña.
Usa el papel pintado en todas las paredes del baño. Además, para aportar profundidad visual al espacio, pinta el techo (o la puerta del baño) de algún color que remate el conjunto. En el caso de optar por colores oscuros, es importante no elegir sanitarios blancos porque el contraste sería demasiado fuerte y no queda bien.
El papel pintado va a seguir siendo un recurso decorativo de moda por su versatilidad
Igual que la mayoría de interioristas, la característica que destacan las profesionales de Diseño Interior Bruto es la versatilidad que ofrece el papel pintado a la hora de decorar. Gracias a la multitud de opciones disponibles, se pueden delimitar zonas dentro de un mismo espacio y “crear ambientes que nos trasladen, por ejemplo, a mundos de fantasía, exóticos o más infantiles”. Específicamente, y en lo que se refiere a integrar el papel pintado en el baño, opinan que depende de muchos factores, pero sobre todo debe encajar con el gusto del cliente y del proyecto en el que trabajan. Solo hay un límite para las interioristas: “nunca recomendamos los papeles que imitan otros materiales, como madera, piedra o ladrillo”.