Una pared blanca demuestra una capacidad atemporal; pero, de la misma manera, pueden llegar a parecer algo vacías y anodinas. Nada que no resuelva un elemento decorativo original para que esas paredes (y el resto de la estancia) respiren estilo y personalidad. Y no, no estamos hablando solo de cuadros. ¿Y es que el arte, cuando se traslada a la pared de un espacio, solo puede venir en forma de cuadro pictórico? Nosotros ya te respondemos que no. Hay más vida aparte del clásico cuadro para colgar de un muro y hacer que, por ejemplo, el salón gane en elegancia, estilo y hasta en dosis artística.
Te lo demostramos con estas cinco opciones de casas reales de la revista Interiores, donde en cada una de ellas se ha optado por un recurso decorativo completamente diferente para vestir las paredes sin tener que recurrir al manido cuadro de detrás del sofá. No decimos que esté prohibido colocar un cuadro, pero antes de irte a la solución clásica, ficha estas ideas que focalizarán la mirada y despertarán el interés en tu salón.
5 alternativas al clásico cuadro para decorar la pared del salón