Cómo preparar la casa para el otoño. Y que el cambio de estación no te pille desprevenida

Aunque las temperaturas siguen sin darnos tregua, el otoño está a la vuelta de la esquina y, si no queremos que nos pille por sorpresa, debemos prepararnos para adaptar nuestra casa a la nueva estación.

Antes de salir a comprar o de mover los muebles de sitio, es el momento de revisar radiadores y comprobar que la chimenea (si eres una de las afortunadas que tiene una) está a punto y puedes encenderla el primer día que haga frío.

Una vez puesta al día la parte más práctica, llega el momento de pasar a la decoración en modo otoño, para que la calidez y el confort se instalen en cada rincón, desde el salón y el comedor hasta el dormitorio, sin olvidar el recibidor. Estas ocho ideas te ayudarán a preparar tu vivienda para el frío y pasar de una estación a otra casi sin darte cuenta.

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1. Momento alfombra

Aunque somos de las que creemos que las alfombras también son para el verano, lo cierto es que cuando llega el frío, las necesitamos sí o sí en el salón, el comedor, el dormitorio o, incluso, en el pasillo.

Eso sí, elige el modelo que más te apetezca o que mejor encaje con el estilo de tus estancias. Las alfombras deben quedar integradas y ser parte de tu casa, no un complemento a modo jarrón.

2. Recupera las cortinas

Tanto si las perdiste por el camino, porque eran pesadas y oscuras, como si decidiste que las ventanas desnudas eran lo tuyo. Y no lo decimos solo porque decoran y aportan calidez a los ambientes, sino porque ayudan a regular la temperatura de las habitaciones y te ayudan a crear la atmósfera perfecta para el descanso.

Si quieres saber qué cortinas serán tendencia en otoño, piensa que se llevan los eternos visillos, neutros y ponibles, pero también (y esto nos encanta), los modelos maximalistas y coloridos que acaparan la atención y hacen que solo tengas ojos para ellos.

Pon cojines y mantitas en el sofá y alfombras en el suelo

3. Saca la mantita del sofá

Y todos los textiles amorosos que hacen que entres en calor con solo mirarlos. Estamos en tiempo de terciopelo, lana o algodón. Y, aunque nos cueste despedirnos de él, es la hora de decir adiós al lino que tan buenos momentos nos ha hecho pasar este verano.

Renovar lo textiles es una de las maneras más efectivas de protegerse del frío invierno y crear una atmósfera muy comfy en cualquier rincón.

4. Di sí a la paleta cromática otoñal

Esa que es capaz de imprimir calidez y convertir una casa en un hogar y un dormitorio en el refugio ideal. No se trata de cambiar las piezas principales y pintar toda la vivienda, aunque son cambios que agradecerás, sino de jugar con la decoración y con los accesorios. Cortinas, cojines, ropa de cama, velas o jarrones son perfectos para dar una pincelada otoñal.

Respecto a los colores que se llevan este otoño, desde el verde aceituna hasta el cherry red, ese rojo con estilo de granate, el rosa palo o el royal blue. En la variedad está el gusto.

5. Da la bienvenida al edredón

Sabemos que el sol luce y que las temperaturas no nos dan un respiro, pero el frío está más cerca de lo que crees y debes estar preparada y bien equipada.

Por eso, revisa que tu edredón está en plena forma y si ves que está fino y ha perdido parte de su poder calorífico y de sus plumas por el camino, hazte con uno nuevo. Tienes tiempo de mirar y de elegir a tu compañero de cama ideal.

6. Renueva los aromas

El olor de una casa dice mucho de la propia vivienda y de sus moradores. En verano se llena de fragancias cítricas y florales, que evocan campos y paisajes bucólicos de la campiña francesa o del parque que ves desde tu casa, pero al llegar el invierno, todo cambia.

Es el momento de pasarse a los aromas amaderados, al caramelo, la canela y la vainilla. Perfumes más cálidos e intensos que ayudan a poner la casa en modo otoño, desde que abres la puerta.

7. Enciende las luces

Más cálidas, por supuesto. Si durante el verano, solo encendías las lámparas durante la noche, porque no te hacían falta o te daban calor, al llegar el otoño, la iluminación es uno de tus mejores aliados.

Lo hemos dicho muchas veces, la luz tiene la capacidad de transformar las estancias y hacer que se vean más amplias, funcionales y bonitas. Revisa que todas las lámparas, de sobremesa o de pie, están bien situadas y funcionan y date un capricho y hazte con algún diseño que te haga especial ilusión.

8. Abraza la madera

Hay pocos materiales que potencien la calidez de un ambiente sin esforzarse como ocurre con la madera. Por este motivo, cuando llega el otoño contar con alguna pieza de madera, es la mejor fórmula deco contra el frío.

No decimos que cambies la decoración de arriba abajo, ni siquiera que te deshagas de las piezas principales, solo que si tienes que renovar alguna de ellas, pienses siempre en la cálida madera.