5 claves de interiorista para decorar el salón en invierno y convertirlo en el lugar más cálido y acogedor de la casa

Durante el invierno, y especialmente en Navidad, el salón es la estancia más concurrida de la casa. Además, se convierte en el espacio preferido para reuniones familiares, y más cuando hay pequeños y personas mayores que disfrutan de tiempo en el sofá. Por eso, la decoradora de interiores especializada en estilismo residencial y en compras de mobiliario de importación, Sandra Marcos, ha compartido algunas claves para que podamos renovar fácilmente nuestro salón de cara al invierno y convertirlo en el lugar más acogedor del mundo. Apunta, porque, además, hemos recopilado otras ideas y piezas para que el cambio sea todavía más fácil y no tengas mucho que pensar.

“Con una paleta cromática adecuada, una iluminación estratégica y la elección de muebles de materiales naturales, es posible crear un ambiente perfecto para disfrutar del tiempo compartido con familiares y amigos esta Navidad”, afirma SANDRA MARCOS.

5 claves para decorar el salón en invierno

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Muebles de madera y materiales naturales

Según señala Sandra Marcos, elegir elementos hechos a base de materiales naturales, como la madera, nos harán estar en sintonía con la naturaleza y convertirán nuestra casa en un hogar cálido y agradable. Siguiendo su consejo, hemos elegido el aparador Isaure de Tikamoon, de nogal macizo y mármol. Un mueble funcional y muy vistoso que combina un diseño moderno con la artesanía de las celosías que forman sus listones.

Lo mejor es que, además, es una pieza muy versátil que se adapta al comedor, para almacenar, por ejemplo, la vajilla y la mantelería, o incluirla en el dormitorio o el despacho gracias a su elegancia natural.

Ilumina con velas y portavelas decorativos

Para la decoradora, “situar varias velas grandes en diferentes lugares de la habitación, como el centro de la mesa, en repisas o en el suelo, ayudará a crear un ambiente íntimo, acogedor y relajante”. Y para aportar el toque de diseño y más personal, lo podemos conseguir con los portavelas. Por ejemplo, estos de la fotografía son de piedra, de la colección de Sandra Marcos y son perfectos para aportar un toque de artesanía a cualquier estancia. Estas piezas, con un acabado rústico y sofisticado, quedan ideales para decorar mesas de comedor, mesas de centro o aparadores.

Textiles que reconfortan

Entre nuestras aportaciones, te proponemos que también tengas en cuenta renovar los textiles. Son los grandes aliados para añadir más calidez al salón. Cojines de lana, mantas de terciopelo o alfombras mullidas en tonos tierra, burdeos o verdes son prácticos y decoran el espacio.

Entre la colección de textiles de Maison du Monde, puedes encontrar estos cojines de algodón y estampado abstracto que son muy originales y dan un punto de modernidad a cualquier espacio.

Lámparas de mesa que decoran

En nuestra opinión, las lámparas de mesa o de pie son otro elemento imprescindible para crear un ambiente cálido y bien iluminado. Por ejemplo, con esta metalizada de H&M Home puedes aportar estilo y sofisticación a cualquier espacio, aunque sea una estancia con un aire más clásico, pues es tendencia la mezcla de estilos y piezas modernas y vintage.

Una mesa redonda como centro de reunión

Las mesas redondas son muy buena opción y muy prácticas para espacios reducidos. Con ellas, se consigue una interacción más íntima entre los comensales y se crea un ambiente cercano y acogedor. Sandra Marcos propone su modelo estrella, una mesa redonda de madera natural.

“El diseño de una mesa redonda permite crear un espacio donde todos los invitados se sientan conectados, además de adaptarse a diversos estilos decorativos,” explica la experta.

Complementa la mesa con detalles textiles, como manteles en tonos neutros o centros de mesa de inspiración natural, o con unas sillas de estilo Gustaviano, tapizadas con terciopelo azul, como estas también de la colección de Sandra Marcos.

Además de estas sugerencias, Sandra Marcos también destaca que es importante priorizar una paleta cromática cálida, siempre que sea posible. Colores como el blanco, el beige, el gris claro o los marrones suaves son geniales para crear un entorno sereno y luminoso. Finalmente, debemos dejar espacio para lo más relevante: la comodidad y la funcionalidad. Para ello, debemos asegurarnos que cada rincón del salón invite a relajarse y a disfrutar de la compañía mutua, algo que podemos conseguir priorizando el orden. Y como truco final, ¡una fragancia que aporte tu toque personal a la estancia!