Con frío a la vista, es el momento de preparar la casa para la nueva estación, incluida la entrada, ya que es lo primero que se ve. Así debe adecuarse al otoño para que no parezca que seguimos en verano, aunque el 22 de septiembre (comienzo oficial) esté a la vuelta de la esquina. Además, las necesidades de esta temporada no son las mismas. Ahora tenemos más cosas que colgar, los abrigos abultan más, las chanclas son botas y vuelven las mochilas del cole y los paraguas.
Antes de empezar, nada mejor que cambiar su color (no te asustes no hace falta pintar) a través de pequeños toques (una vela, un puff…) o con un mueble de una de las tonalidades que más se van a ver en estos meses, como el verde aceituna o el terracota, que nos reciban con una atmósfera más calentita y agradable. Si quieres saber qué necesitas para tu recibidor en modo otoño, estas siete ideas de decoración serán tu mejor inspiración.