La llegada del otoño trae consigo un cambio de colores, donde los blancos inmaculados y los vitaminados dan paso a tonos más intensos, que no oscuros, más apetecibles y cálidos. Ya te contamos qué 5 tonalidades saltaban de la pasarela a la casa esta temporada, pero ahora hemos preguntado a dos expertos para que nos revelen cuál va a ser el color con más tirón este otoño.
Los interioristas María Acha y Alberto Torres lo tienen claro: el terracota tiene todas las papeletas para triunfar, aunque seguido de cerca por verdes y azules. Descubre aquí qué tiene de especial esta tonalidad y cómo incorporarla a tus estancias.
Por qué lo amamos
Nos gusta porque sube la temperatura (y los grados) del ambiente, pero también porque supone un cambio de escenario y nos infunde la energía necesaria para afrontar los días malos y fríos.
"Las tonalidades más elegantes para la decoración de este otoño son aquellas que invitan a la calma y el confort y que están conectadas a la tierra y a la naturaleza, como el terracota, el marrón y el ocre", señala María Acha.
“El color terracota intenso captura perfectamente la esencia del otoño. Su calidez y vibración aportan un toque de sofisticación al espacio, creando un ambiente acogedor sin perder elegancia", apunta Alberto Torres, del estudio de Portobello Street.
Cómo lo combinamos
Caer bajo su hechizo es fácil, tan sencillo como usarlo y combinarlo. Torres nos recomienda "convertirlo en el punto focal de un comedor, a través del tapizado de las sillas o de detalles decorativos como unas flores, en un recibidor con un cuadro o en el salón o el dormitorio con los accesorios textiles, como cojines y plaids".
Además, aconseja que "los tonos neutros, como el blanco y el beige, son ideales para crear una base limpia y luminosa que realce al terracota. Los detalles en madera natural también consiguen añadir un toque de calidez en combinación con este color".
En pequeñas dosis
Apostar por un total look puede ser excesivo. Por eso, Acha recomienda que "si la inmersión total es demasiado, la clave será siempre el uso de detalles que creen acentos de color y aporten energía al conjunto. Un sillón, unos cojines o alfombras en tonos terracotas pueden transformar completamente un espacio. También los accesorios como lámparas, cortinas o incluso piezas de arte. En general, los textiles, las obras de arte y los detalles decorativos, pueden aportar el toque de color, permitiéndonos mantener la armonía creada por una base neutra y natural".
Sin problemas de estilo
Si bien puede intimidarte, no deja de ser un tono fácil de integrar en cualquier estancia y estilo decorativo. En interiores contemporáneos amará los colores intensos como el negro o el rojo vino y objetos en latón, mármol o cerámica.
Para una decoración nórdica, nada mejor que la luminosidad del blanco y los tonos claros y suaves para realzar su intensidad, con la madera como material estrella. Mientras que en estilos bohemios se encontrará cómodo con fibras vegetales y rodeado de plantas.
Otros colores que también pisan fuerte este otoño
Eso sí, el terracota no está solo. Junto a él hay "otros colores conectados a la naturaleza como el azulcobalto o el verde terroso", apunta María.
Torres destaca también el "verde salvia porque evoca la frescura de la naturaleza, a la vez que aporta una sensación de calma y relajación al espacio. Un tono ideal para quienes buscan un diseño que conecte con la naturaleza y mantenga un ambiente sereno y sofisticado”.